El virus de la parvovirosis

La parvovirosis es una enfermedad vírica que pueden sufrir los perros pero este tipo de virus , el parvovirus , lo encontramos también en otras enfermedades que afectan a otras mascotas como a los gatos en forma de panleucopenia y en los hurones la enfermedad aleutiana . También se encuentran en otros muchos animales . Cada especie tiene su parvovirus y entre ellas no existe contagio.

Imagen de un perro con parvovirosis

Es una enfermedad que se suele ver en cachorros de alrededor de 2 meses con un historial de haber podido tener un contacto con algún animal enfermo o con algún material infectado y con un calendario de vacunas todavía no completado.

La característica principal de este virus es que se multiplica en células del epitelio intestinal principalmente pero también la puede hacer en la médula ósea y más raramente en el tejido cardiaco.

Las consecuencias de esta multiplicación en el sistema digetivo son la destrucción de las vellosidades intestinales , es decir , de la superficie del intestino , haciendo que no exista una barrera adecuada delante del contenido intestinal por un lado y por otro haciendo imposible la digestión y absorción de los nutrientes que por el pasan.

Los síntomas más frecuentes son los de abundantes diarreas muy malolientes o sanguinolentas con consistencia casi totalmente líquida acompañadas de vómitos de difícil control con medicación.

El diagnóstico se suele hacer cogiendo estas heces y haciéndoles un test , el cual da positivo si detecta el virus .

La sangre que vemos suele provenir de la enorme inflamación que provoca en los intestinos .

Los efectos en la médula ósea casi son más devastadores que en los intestinos y cuando ocurren de manera importantes son los principales causantes de la mortalidad ya que hacen que las defensas de los animales se encuentren por los suelos , justo cuando más las necesitan . La imposibilidad de poder luchar contra las complicaciones que se suceden , como es el paso de bacterias del intestino al torrente sanguineo y de allí a cualquier lado , hacen que los riesgos de septicemias sean muy altos y que pese a que les pongamos antibióticos , estos no sean sufientes.

Cuando encontramos multiplicación en el corazón suelen ser letal y se suele dar en casos de animales de pocas semanas de vida.

El tratamiento consiste en mantener a estos animales hidratados mediantes sueros endovenosos , intentar controlar los síntomas , vómitos sobretodo y utilizar antibióticos de cobertura. Normalmente suelen necesitar unos 3-4 días de hospitalización.

En algunos casos es necesario el suministro de nutrición parenteral  , otros se ven beneficiados por transfusiones de sangre , en ellas les suministramos defensas del perro donante y proteínas de gran valor y existen estudios en el uso de interferones para potenciar la inmunidad de estos cachorros ya que se cree que es una de las causas fundamentales para que se puedan salvar.

Aquellos animales que responden bien al tratamiento poco a poco se les va suministrando comida de alta digestibilidad y productos para regenerar sus intestinos , tanto el epitelio como la flora.

Dependiendo de la cepa de virus que les afecte podemos tener supervivencias que nos lleven desde el 90% al 70% pero algunas son tan letales que pueden llegar a matar al 50% de los cachorros o más .

La manera de prevenirla es con vacunas y limpieza . Las madres deben estar bien vacunadas y mantener niveles adecuados de anticuerpos durante la lactación , para que se los puedan dar a sus cachorros mediente el calostro , y los cachorros deben lactar por lo menos hasta el mes y medio . A partir de esa edad se les puede poner vacunas que no interfieran con los anticuerpos de la madre y durante todo su calendario vacunal evitar al máximo la exposición al virus , no dejarlo en zonas sucias donde hayan podido ir otros perros no controlados y que tenga contacto sólo con perro sanos y controlados.

El parvovirus es muy resistente en el ambiente y es por eso que no se aconseja que estos cachorros no vacunados al 100% salgan a la calle , lo que tampoco hay que hacer es que no tengan contacto con nada y vivan en una burbuja aislados , ya que esta etapa es funadamental para la sociabilización .

Si hemos tenido un perro con esta enfermedad debemos limpiar bien todo con lejía y tirar todos aquellos objetos que podamos que le pertenecieran , lo recomendable es no introducir ningún cachorro por lo menos durante un mes.