Gato Persa

El compañero de piso ideal

"...Después de muchos años de selección, se han obtenido más de cien variedades de gato Persa .."


Esta raza es originaria del antiguo reino de Persia, actual Irán, Turquía, procede del gato de angora turco. En el s.XVIII fue llevada a Italia y en el s. XIX a Francia e Inglaterra, donde se perfeccionaron con la incorporación de sangre de gatos de angora, obteniendo así, un pelo más sedoso y multiplicando los colores de la capa.

El cuerpo del gato Persa es compacto y tiene una longitud de unos 40 a 50 cm, más 25 o 30 de cola. Es de estructura robusta y extremidades cortas y fuertes, la cabeza es redonda, maciza y bien equilibrada, los pómulos bien desarrollados y la frente abultada. La nariz, es una de las características que más definen al Persa, es pequeña corta y ancha, se ha modificado mediante selección genética, hasta límites peligrosos para su salud. Los ojos de este gato son grandes, redondos y muy brillantes, el color es cobre en la mayoría de capas de pelo, verde en los colores sombreados y azules en el blanco.

Después de muchos años de selección, se han obtenido más de cien variedades de gato Persa, que se dividen en 4 subgrupos, dependiendo del color de la capa:

  • Grupo1: Persas con capa compuesta por pelos monocromos de raíz a punta, los colores pueden se sólidos o diluidos, tourtels, bicolores,tricolores, arlequines, "van" y "calicó"

  • Grupo2: Persas que presentan parte del pelo despigmentado; chinchilla, plateado, dorado, ahumado, camafeo, en todos los colores reconocidos.

  • Grupo3: este grupo lo componen los gatos que tienen el color más denso en las extremidades, colorpoint, tipo siamés.

  • Grupo4: Formado por los Persas atigrados.


El temperamento del Persa es ampliamente conocido, es un gato muy tranquilo y muy vago, los ejemplares de esta raza suelen ser muy sociables y afectuosos. Otra característica de estos gatos es que tienen la voz suave y son poco vocalizadores. Debido a la constante selección, este gato a perdido su instinto cazador.
Todas estas características hacen del gato Persa, sin duda, el gato de compañía ideal para tener en un piso, incluso se le llama el “gato almohada”.