Castración

Castración

Beneficios de esta intervención quirúrgica

"La castración es una práctica recomendada por los profesionales, para prevenir problemas de diferentes tipos en el futuro..."

La castración es una práctica recomendada por los profesionales, para prevenir problemas de diferentes tipos en el futuro, siempre y cuando no se quiera hacer criar. Hay controversia sobre la edad a la que es más recomendable practicarla, pero hay más consenso sobre sus beneficios.

 

En los machos, tanto perros como gatos, es recomendable para evitar problemas de comportamiento que se presentan durante la adolescencia/madurez (agresividad, marcaje,etc), y concretamente en el caso de los perros, problemas de próstata que aparecen con la edad y que están directamente relacionados con los niveles hormonales en sangre.

 

En el caso de las hembras, las ventajas son aun más claras. Por una banda, el propietario se ahorra las molestias ocasionadas por el celo y la posibilidad de que se quede preñada por algún pretendiente. Diferentes estudios, además, han establecido una relación directa entre los niveles hormonales y los tumores de mama, de manera que la esterilización reduce drásticamente su incidencia. Por último, se elimina la posibilidad de una infección de matriz, que se puede dar en cualquier momento de su vida, pero que es más probable a medida que pasan los años, y dada la larga esperanza de vida de las mascotas por diferentes razones, esta probabilidad es más alta.

 

Son intervenciones rutinarias, aunque como cualquier cirugía, hay unos riesgos asociados que pueden ser minimizados o prevenidos con análisis previos, y una monitorización del paciente. En el caso del macho, por su anatomia, resulta más fácil; en el caso de la hembra, la intervención es más invasiva porque hay que acceder dentro del abdomen. Siguiendo las recomendaciones del facultativo, la mayoría de pacientes tienen una recuperación satisfactoria en menos de una semana. Es necesario revisar a los pocos días para asegurarnos de que todo va bien.

 

Muchos propietarios tienen miedo de que sus mascotas pierdan vitalidad después de la operación, sean menos activas, o incluso cambien su carácter. La actividad sexual disminuye lógicamente, como consecuencia de la falta de hormonas sexuales en sangre, pero está en la mano del propietario, potenciar otros tipos de actividad (paseos largos, juegos, practicar Agilidad, etc.) que mantengan el animal motivado y en forma. Además, favoreceremos el vínculo que nos une con nuestros amigos de cuatro patas, que es lo más especial que podemos compartir con ellos.