Chihuahua
El perro más pequeño del mundo
"El mundialmente conocido como chihuahua, el perro más pequeño del mundo, se llama en realidad Chihuahueño...."
El mundialmente conocido como chihuahua, el perro más pequeño del mundo, se llama en realidad Chihuahueño, este cambio de nombre no oficial, pero tan extendido, se debe a que la fonética en EUA, donde esta raza tiene gran éxito, no contempla la "ñ" con lo que la pronunciación de su nombre es imposible, por lo que se a optado por Chihuahua, ciudad mexicana donde fue descubierto y donde sus antepasados silvestres fueron domesticados por los indígenas. Se cree que este perro casi de juguete "toy", es descendiente de Techichi, perro diminuto y sagrado de apariencia muy similar al chihuahua actual, que fue representado en gravados de la antigua civilización Tolteca.
Al contrario de lo que se pudiera pensar, los estándares de esta raza no especifican la altura del animal, ni el color, solo un peso y la descripción de sus proporciones, por lo que ejemplares
consanguíneos de la misma raza, pueden tener alturas que varíen entre los 15 y los 38 cm siendo todo el espectro comprendido entre estas medidas aceptado como raza.
A parte del tamaño, las características más típicas del chihuahua, son su gran cabeza amanzanada, sus orejas rectas y sus grandes y brillantes ojos, aunque por lo que realmente son apreciados por sus propietarios, es por su devoción y personalidad valiente, su estado de alerta y su inteligencia, todas estas características hacen a este perro, muy apegado a su amo, llegando incluso a tornarse en algunas ocasiones, celoso. Puede ser difícil su entrenamiento en la convivencia, ya que su carácter lo lleva a morder cuando se siente amenazado, aunque con la correcta educación y potenciación de sus cualidades, se convertirá en una mascota excelente, aunque en ningún caso apta para el manejo brusco o con niños pequeños.
Un aspecto a tener en cuenta a la hora de tener un chihuahua en casa, es que, aunque su esperanza de vida es larga, unos 15 años, es una raza con tendencia a tener anomalías genéticas, así como afecciones cardíacas y oculares, es por eso, que es recomendable la visita regular y periódica al veterinario.
Tània Salas